viernes, 26 de agosto de 2011

"23/12/ 2012 2:55 a.m. Lucas."

"Nunca imagine que en realidad pasara, esto es el apocalipsis."

El reloj de la tienda me brindo la hora, se ve como si nunca fuera a salir el sol. Me quede mirando el telefono esperando una respuesta por 15 minutos...

¿En que cabeza cabía? me llamarían a mi celular, el cual deje tirado en la habitación. Tope mi cabeza contra la pared, imbécil, trate de volver a marcar pero la linea había muerto. Me pare y vi por el cristal, estaba una de esas cosas viendo hacia la ventana, esos horribles ojos negros no me veían al parecer, no me seguian a donde me moviera solo parecia que veia su reflejo, orgulloso de su traje al parecer, es algo gracioso. Me acerque a la caja y parece que capte su atencion, se pego al cristal, tratandolo de morder varias veces, pero de una manera lenta no agresiva, ¿Seran parte ciegos? o solo es que son solo demasiado lentos. Me acerque al vidrio y se alteraba mas y mas, Cuando quise retroceder era muy tarde, el cristal se movía fuertemente haciendo un ruido aturdidor que llamo a mas, no cedio hasta que quebró el cristal. La puerta de personal se encontraba abierta, entre rápido poniendo el seguro, con las manos en los ojos me di cuenta  de lo obvio, un plan, de inmediato, ¡Necesito con que defenderme! pero solo hay comestibles y botellas de cristal vacías.  Moví estantes, cajas, hasta que encontré un bate entre las escobas .

Parecía que ya se habia juntado un buen numero de los monstruos  pues ya forcejeaban la entrada a la bodega. No podía creer que no habia ruta de escape señalada ni visible, el baño de empleados tiene una ventana espero que sea lo bastante grande, no tengo altas expectativas. -¿Que carajos.- la puerta de emergencia estaba del otro lado del escusado, arquitectos que compran títulos, siempre son tan graciosos. Tenia el camino limpio, esos cretinos se atoraron en la tienda.

 No podía volver al hotel por mi celular, ir por mi auto es una misión suicida, estos desgraciados viajan juntos y habían muchos de ellos custodiando el hotel.Que maldito miedo, ademas ¿Ahora a donde me dirijo? Caí sobre mis rodillas a punto del ataque nervioso. Nunca imagine que en realidad pasara, esto es el apocalipsis o solo  sigo en la cama en el hotel. En mi brazo, se mostraba una herida, parecia que un cristal me había cortado, es un poco prufunda por el color de la sangre. Me quite la camisa e hice un vendaje. Me parece obvio que la sangre los alerta, me debo levantar, tengo que llegar a mi mujer, a mis amigos, a mi familia, no ser la comida de estos bastardos. Ya sabia que hacer, primero buscar ropa mas apropiada para ocasión, unos zapatos cómodos por si tenia que caminar, armas,  y una radio.

En algún momento de esta retorcida aventura me imagine que pasaría, la calle es pandemónium, colonias atragantándose de la gente que trato en algún momento de escapar. Fuego, gritos, disparos y sangre, todo lo que necesitas para  pintar un infierno. Se que esa ruta sera por mucho mi muerte. Tengo que tomar una ruta alterna, tendré que irme entre calles.

Tratando de ser inteligente tome el baldío del hotel, los"zombies" por así llamarlos, no tienen buena vista y yo ya me había aclimatado a la poca luz, estoy en ventaja sobre de ellos. Llegue a un muro alto, debe de ser una colonia residencial, irrumpiré, tomare lo que necesito, buscare un auto, ya lo demás sera historia. Camine alrededor del muro, hasta que llegue a un montículo que me ayudo a subir de un salto.  Baje lo mas discretamente que pude,  la casa parecía sola, ni un movimiento por la ventana trasera, en el segundo piso se ve algo, pero al parecer solo es una cortina que se mueve con el viento. La puerta trasera esta sin seguro, la cocina es la primera habitación, el refrigerador esta suavemente abierto dándome un norte hacia donde moverme. Me pare en la puerta que daba a la sala y al comedor, no veía bien estaba muy oscuro, abrí el refrigerador por completo. -Aaaaa!- Grite y golpeo a un cadáver con el bate. Espero nadie me aya escuchado, parece que mi victima se estaba transformando cuando alguien mas la apuñalo a la muerte; di una ronda antes de subir al segundo piso. Habia una niña a los pies de la escalera, con el cuello roto y la garganta cortada de lado a lado, parece que ella también se estaba transformando.

Me fui en cuclillas por las escaleras asomando apenas la mirada, en la habitación principal había algo, solo se columpiaba de lado a lado, un ahorcado. Cerré la puerta tras de mi, el hombre parece en paz, como si no hace tanto se ahorco, tenia una nota en su cuerpo que dice, "Perdón mis angeles." Que despiadada la idea de matar a quienes amas. Esta debe ser su habitación, su ropa me a de quedar. Unas botas, una camisa y unos jeans fue la única ropa que me quedo. -Gracias.- dije, pero en realidad, gracias, sus manos llenas de sangre me recordaron lo efectivo que se vio el cuchillo. Ya casi tengo todo resuelto, el auto familiar me bastara hasta encontrar algo mejor en un par de kilómetros.

 En el tocador un lado de la cama hay un retrato, parecen, mama, papa y dos hijas, solo vi tres cadáveres, tengo que estar alerta. Volví a la cocina, abrí cada gaveta, un cuchillo de carnicero se encontraba coqueto y dispuesto a protegerme en un cajón con otras posibilidades, suerte la mía. Una silueta entra a la cocina, era la niña en su camisón de noche, no la distinguía bien en la oscuridad. Tome la base del bate con ambas manos esperando con anticipación. Arrastraba los pies y le sangraban al parecer, hay un brillo abajo de su cara, un cuchillo en su pecho. Se acerco mas a mi, no había luz que me ayude a distinguirla, dios me salve por hacer esto. Trono su quijada y cayo al suelo por la gracia de ese pedazo de madera en mis manos. Me iré al infierno por matar una niña,  la moví con el pie, parecía no tener cabello, costras por toda su piel, parece también que no tenia sentido del dolor, pues sus labios parecía haberlos masticado en un ataque desesperado, me agache a tocarle la piel y se sentía algo rara como dura. Es muy distinta a los que había visto antes, ¿Que sera? que importa, tengo que poner mis manos en unas llaves. Busque en el comedor, en la sala, sin ni un resultado. La lógica golpea mi cabeza, las llaves las debe de tener el ahorcado.

Me pare al frente de la escalera, el ruido de afuera parecía independiente a este momento... La niña se encontraba mirándome, con esos ojos rojos inyectados en sangre , parada en cuatro patas sobre la mesa rasgando la con sus garras, sonidos guturales salen de su boca, no me puedo mover, según veo esta lista para atacarme. Grita fuertemente, como un chillido agudo y se lanza contra mi, le empujo con el bate hacia la pared y subo a gatas las escaleras. Desamarre desesperado de mi pantalón el machete, ella se levanto, corrió en cuatro patas hacia la escalera, la esperaba arriba, solo necesitaba un golpe claro en la cabeza. Subió sin despegar las manos del suelo, le lance con mi arma de mano pero la esquivo, se lanzo sobre mi tratándome de morder, pude hacer apoyo con las piernas y tirarla. Me metí a la habitación, rompi el mosquitero con el bate, la caída seria de dos metros con el vecino. No quiero saltar pero si esa cosa no se mato al caer por las escaleras nada que pueda hacer yo lo hará. Salte al techo de la casa contigua, no llegue y golpee la pared desplomando me sobre el pasto.

No me podía mover, estaba a punto del desmayo, la contusión y el susto me están desplomando. Veo como una colonia se me acerca y no puedo mas que arrastrarme, eventualmente si no gano fuerza me alcanzaran.
Si me comen nadie dijo que no lo intente. -¡AUXILIO!-Grite esperando alguien viniera a salvarme, pero solo lograba acercar mas y mas colonias.  No me pude salvar ni yo mismo, las colonias están sobre de mi...

 Una cabeza cae entre mis piernas.


lunes, 22 de agosto de 2011

"22/12/2012 Carlos"

"¡ME MORDIO! ¡LA DESGRACIADA ME MORDIO! ¡AYUDA POR FAVOR!"


Es otro dia con un frio infernal, pero cabe decir que no es un dia mas ya que solo faltan 2 dias mas para navidad y ya saben lo que significa, fiesta, fiesta y mas fiesta. Fiestas a las que no debería asistir, ya que no cuento con mucho capital, ¿Que puedo decir? soy pésimo para guardar dinero y mi nuevo empleo como portero de casino no ayuda mucho, la buena noticia es que David, mi promotor me aviso que dentro de poco tendré una pelea como apertura a uno de los grandes boxeadores, no es la gran cosa pero me estoy abriendo paso a la cima y la paga es buena o eso espero.


 Me dirijo a casa del desgraciado con mas suerte en el mundo y también mi mejor amigo Lucas, aunque el no este en la ciudad por algo sobre un empleo, quede con el en que pasaría a su casa de vez en cuando para saludar a su esposa y definitivamente ver si me puedo comer las sobras de ayer. Aunque conociendo a Nuvia de seguro me dara algo de comer, es verdaderamente buena cocinando. Al llegar a su casa estaciono mi Ferrari frente a su cochera, o si ese es el sobrenombre que el desgraciado de Lucas le puso a mi cafetera con ruedas, pero no me quejo jamas me ah fallado, al bajarme del carro y tocar el timbre de la puerta veo como uno de los vecinos me mira sospechosamente, claro debe verse bastante mal el echo de que venga a visitar a la mujer de mi mejor amigo mientras el no esta, pero que puedo decir, lo mas importante para mi es la lealtad por eso Lucas confía en mi. Escucho algunos pasos aproximándose a la puerta y Nuvia abre la puerta – Carlos hola que tal, crei que solo le habias dicho a Lucas que vendrías para que no se preocupara- dijo con sierta voz de sorpresa, -no, tu sabes que si se entera que no estuve aquí se las cobrara el bastardo siempre sabe como cobrárselas-, ella solo sonríe y me invita a pasar, por desgracia para mi. El celular comenzo a sonar y al contestar escucho la voz mas odiosa en todo el mundo, mi jefe Santiago, contesto la llamada y sin tiempo de decir absolutamente nada me dice “Ey Carlos necesito que vengas ya, al casino abriremos mas temprano hoy, te espero” dicho eso me corta la llamada inmediatamente, el maldito ni siquiera me deja contestarle nada y ¿Que pasa con las personas? por alguna razón a la gente le da por apostar mas cuando el año esta por acabarse. Doy un gran suspiro y le digo - Nube debo irme y le pasas reporte a tu marido o si y me guardas de lo que hagas de comer.- con una sonrisa me contesta - no hay problema, ademas.- saca un plato cubierto con aluminio. -Para que no asaltes mi refri a escondidas, suerte en el trabajo.- por dios juro que si Lucas algún dia la trata mal yo mismo lo mato.


  Me dirijo al trabajo, que esta a unas cuadras mas adelantes. Al llegar veo a Santiago afuera del casino hablando con unos policías, eso me inspiro algo de desconfianza y al bajarme del carro veo que los policías se van del lugar. Santiago se acerca a mi gritando con su muy odiosa voz -¡Heeeey Carlitos! como te va amigo? Lamento hacerte venir a trabajar mas temprano pero te recompensare, recuerdas a Gabriela la del sindicato?-,me pregunta como si alguien se pudiese olvidar de ella y ese par de piernas, -la de las piernas bonitas?- Le conteste algo emocionado, -¡Exacto! pues me ah estado preguntando por ti y le dije que les arreglaría algo, pero claro necesito que me hagas un favor a cambio- me dijo rápida y convincentemente, la verdad es que siempre a sabido convencerme, -mira la cosa esta asi, hoy te necesito dentro del casino a mi lado tu sabes cuidándome la espalda, hace un par de horas pasaron algunos incidentes a las orillas de la ciudad nada grave ni de que preocuparse pero me gustaría contar contigo y que estes muy alerta por si llegase a ocurrir algo mas, me entiendes?-. Debo admitir que me preocupó un poco ya que parecía asustado, Santiago no es de los que asustan a menos de que haya dinero en juego, pero de igual manera acepte.


 La noche fue un tanto larga, aburrida y todo parecía señalar que seria una noche mas.Ya cerca de las las cero horas vi a mi remplazo Raúl entrar por la puerta con una herida en el cuello sangrando y gritando -¡ME MORDIO! ¡LA DESGRACIADA ME MORDIO! ¡AYUDA POR FAVOR!- gritaba desesperada mente mientras caía al piso desmayándose, entre en shock. Por el pasillo venia una mujer arrastrando los pies  con movimientos raros como faltos de fuerza ,  trae ropas rasgadas, su piel esta un poco pálida sus venas se marcaban en su piel, la sangre de Raúl le goteaba de la boca, parecía muerta pero de alguna forma no lo estaba, no tardo en desatarse el pánico las personas corrieron a las salidas de emergencia, Las puertas no abrían, parecia que las estaba empujando desde fuera. Yo estaba impresionado con lo que estaba ocurriendo parecía una pesadilla, creía estar dormido, simple y sencillamente era algo aterrador.  De pronto sentí un codazo en las costillas de Santiago – ¿Que carajos haces hay parado? Idiota debemos largarnos de aquí vamos a mi oficina hay otra salida por ahí.- Sin pensarlo mucho solo asentí con la cabeza y lo seguí, quería avisar a las demás personas pero ya no se lo que ocurre, una de las salidas de emergencia se rompió y esas cosas entraban mordiendo lo que estuviese en frente de dos o tres por persona. Simplemente no terminaba de asimilar la situación hasta que una de esas cosas nos bloqueo el camino - ¡Carlos has algo!- grito Santiago asustado, esa cosa se abalanzó sobre mi y por mera reacción o instinto le di un golpe en la quijada derribándole -¡Eso es campeón!- me felicito, pero parece que prematuramente, esa cosa comenzó a levantarse de nuevo, al ver que se reincorporaba lento, corrimos hacia la oficina.


 -Bien aquí están las llaves de mi carro, larguémonos de aquí- dijo Santiago aliviadamente mientras tomaba las llaves de su escritorio – Esto tambien nos puede servir- tomo un arma que tenia en vitrina y se la guardo en el pantalón. Salimos lentamente por la salida de emergencia que el bastardo había construido para si mismo, al no ver movimiento subimos a su auto, al encender el motor escuchamos un golpe en la cajuela -¡Arranca!- me gritaron muy alterados,sea lo que haya sido estoy seguro de haberlo dejado atrás. -¿Que demonios son esas cosas?-  le pregunte. - No lo se chico, pero en estos momentos me alegra que no tengamos familia, así podemos irnos a otra maldita ciudad- me contesto. Al terminar de hablar se me vino a la mente Lucas, ¡Por dios! me había olvidado de la mujer de mi mejor amigo mientras yo estoy en un carro con rumbo a no se donde, Nube esta sola, saque mi celular para llamarla, busque su numero pero olvide ver al frente, la luz de otro auto me cegó y derrapamos contra un muro.


Al recuperarme del golpe, Santiago ya no estaba a mi lado, ni mi celular, ni el arma, mi puerta estaba bloqueada por el muro y las bolsas de aire estaban fuera, dios bendiga a las malditas bolsas de aire. Pateo la puerta del copiloto, oigo ambulancias, disparos, gritos pero no hay nadie en la cercanía.El infierno había tomado el lugar de la ciudad ese cálido infierno de edificios  quemándose, de caos y tormento. Aun parece de noche, pero me pregunto cuanto tiempo estuve inconsiente y lo mas importante ¿Estará Nube bien?

viernes, 19 de agosto de 2011

"23/12/2012"

"Ella párese estarlo besando o algo así,  pero la luz de la luna me dejo ver que la sangre era la sabana de esa cama."

No se, no puedo dormir, tenia rato sin estar lejos de mi casa pero un nuevo trabajo estaba en puerta y si quería sobrevivir mas aya del mes, tenia que hacer este tipo de viajes, espero y mañana sea mi ultimo día aqui, no pasare navidad solo. Me levante de la cama, encendiendo el televisor, "Hoy sera un buen día." Decia una leyenda a lo ancho de la imagen,canales de religión los deberían de prohibir, pero continué cambiando canales y estaba en cada uno de ellos, este motel barato me quiere hacer pagar  por programación mas aya de media noche. Se me salio un suspiro de desaliento. ¿Que mas da? si yo sabia que la respuesta a mi insomnio esta sobre la mesa, tome el encendedor, mis cigarros, apague los detectores de humo y me senté dispuesto a disfrutarlo mientras el vecino de mi dedo indice apuntaba al letrero que hacia ver como un delito la inhalación de humo de la mas pura nicotina.

 De repente tocan la puerta. ¡Carajo se dieron cuenta! No se donde poner el cigarrillo, tocan la puerta cada vez mas fuerte. -En un momento, estoy em... desnudo.- lo apague discretamente y abrí la ventana trasera, tocan como unos malditos locos. -¡ En un momento!- Grite. Pero algo raro sucede, cuando tocan la puerta se oye mas ruido de lo que una persona podía hacer. Puse mi oreja en la puerta, se oye como si algo castañeara al otro lado mientras golpeaban la puerta, extendí la mano y di un fuerte golpe. Un silencio absoluto le siguió al eco de la madera. Di  unos pasos hacia atrás esperando una reacción, tal vez son ladrones o deje sordo al empleado de seguridad o solo tal ves, pero solo tal ves solo era el viento que arrastro algo a mi puerta. Me senté en el colchón, con el encendedor en mano y cigarro en la boca.

¡La ventana delantera se quebro! Cae un cuerpo frente a mi. ¡¿Que carajo!? mi primera reacción fue saltar al lado contrario de la cama. La puerta empezó a moverse, tambalearse como si la quisieran derrumbar. No me quería quedar pero tenia la morbosa curiosidad de ver la cara de quien me lanzo con un muerto. Una respiración muy pesada atrapo mi curiosidad suena cerca de mi. La mano de quien estuviese en el piso se estaba apoyando en la cama. -¡Llamare a la policía bastardo! así que quédate  ahí abajo.- tome un lampara a un lado mio - tengo un arma maldito imbécil y se como usarla.- Mierda peor idea no pude haber tenido, se levantaba lentamente. Abrí mi celular para llamar pero no había señal. Cuando al fin mostró su rostro, Tenia piel resbalando por su mejilla, sus ojos eran obscuros como la noche, traía todas desgarradas las ropas, parecía un joven como de mi edad, la mandíbula parecia colgarse le y ese castañeo de dientes entre sonidos guturales, esa fue mi señal para saltar por la ventana trasera. Correr hacia mi auto, ese es el plan, rodear el motel y seria el primero a la vuelta.

Son tres habitaciones a lo largo y dos a lo ancho, tengo que recorrer sin que quien me sigue, no me haga lo mismo que aquel  tipo de mi habitación. Pase por debajo de la primera ventana no hay ruido ni luces, párese seguro. Camine hacia la segunda pero hay un solo inconveniente el silencio lo rompía ese sonido como el de un animal comiendo. Solo daré un vistazo, pero no pense arrepentirme tanto, una mujer yace sobre un hombre en la cama,  ella párese estarlo besando o algo así,  pero la luz de la luna me dejo ver que la sangre era la sabana de esa cama, esa fémina le arranco los trozos de carne del cuello al individuo y los tragaba como una maldita hiena. Me paralice, nunca había visto algo tan crudo y horrible. Mis piernas empezaron a temblar, mi sentido común dice "¡Apártate de la ventana!" pero mi pies no me dejaban. Parece de locos, aun asi,  esto parece una pesadilla que e tenido tantas veces y todas ellas no terminaban bien.

Un sonido bofo me saco de mi trance, estaban saliendo mas de esas cosas de la ventana que deje abierta. Esto no se trata de salir sin ser visto. Brinque la cerca al baldío tras del hotel, se ve una estación de servicio al final de la cuadra, tiene que haber un teléfono para llamar a quien fuese pero que me ayudara. No veía el camino bajo mis pies, no había iluminacion alguna y aun estaba descalzo  camine hacia la banqueta cerciorando que no hubiese nada a la cercanía que me dañara. las calles parecían solas pero se veía pequeños grupos de personas deambulando lentamente. No podía creerlo ¿Estaba pasando que solo creía ver en televisión o había leído en libros acaso? Aun no saco esos ojos vacíos de mi mente, al mujer comiendo a su pareja. Lo que fuese tenia que llegar a esa estación y saber si mi familia esta bien. Se que no me pueden alcanzar si corro y los evado, son torpes, si no lo fuesen estaría en ese cuarto de hotel siendo su alimento.

No se ve nadie en la estación y veo las dos cabinas telefónicas. Entre cerrando la puerta tras de mi con los revisteros, no es mucho pero me dará tiempo. Me senté donde la pared me tapaba, llame a mi esposa  sin excito, solo una persona no se daría su tiempo para preguntar, Carlos. Ese maldito infeliz a de estar dormido pero si contesta podre estar tranquilo. -Si me llamas y no contesto es porque no eres tan chingon para merecer mi atencion.- Estúpido y ofensivo correo de voz. -Carlos, espero y oigas esto, algo raro esta pasando, no se bien que es pero necesito, que vayas a mi casa y veas si mi esposa esta bien y quédense ahi si asi es. llevate algo con que protegerte...- La llamada se corto, espero que esten bien.